En los últimos años a menudo oímos
extrañas expresiones que unen dos religiones completamente diferentes, tales
como “fe judeocristiana” o “pensamiento judeocristiano”,
etc.; voces llamándolo al judaísmo “madre
del cristianismo” o considerando el cristianismo como “una religión
joven”. El artículo presentado muestra brevemente, si son
competentes tales declaraciones o no.